La Canadian Chamber of Commerce, la US Chamber of Commerce y el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), emitieron un posicionamiento para los mandatarios de los gobiernos de Norteamérica con motivo de la reunión de mañana jueves en Washington D.C
Organismos empresariales de Estados Unidos, Canadá y México aseguraron que les preocupan los esfuerzos del gobierno mexicano por reducir la competencia del sector privado en la industria energética de México.
La Canadian Chamber of Commerce, la US Chamber of Commerce y el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), emitieron un posicionamiento para los mandatarios de los gobiernos de Norteamérica con motivo de la reunión de mañana jueves en Washington DC.
En el documento afirman que los mandatarios deben de comprometerse a que haya “avances tangibles” y pidieron coordinar el trabajo en torno a tres temas. Primero, la plena implementación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
En segundo lugar incrementar la competitividad, para lo cual los gobiernos deben garantizar ambientes de inversión abiertos y transparentes y, en tercer lugar que los gobiernos capitalicen las lecciones aprendidas de la pandemia de Covid-19 y mejoren la coordinación en la respuesta a emergencias, es decir, alinear la definición de industrias y servicios esenciales en los tres países.
En el documento, los representantes de los tres organismos empresariales afirmaron también que “están muy preocupados por los esfuerzos del gobierno mexicano por reducir la competencia privada en el sector energético.
“Los intentos por favorecer empresas del Estado en detrimento de proveedores de energías renovables minan la certidumbre de inversiones y auguran mayores costos así como menores oportunidades para los trabajadores de nuestros países”.
Agregaron que si se deteriora el ambiente de inversión en cualquiera de los países se “daña la economía, la seguridad y el potencial de crecimiento de Norteamérica en su conjunto, y minan la capacidad del TMEC como instrumentos de certidumbre legal”.
Los representantes del sector privado de los tres países añadieron que como inversionistas es su responsabilidad advertir que el potencial que se tiene por el T-MEC “no se materializará en países que no aseguren certidumbre para los negocios y apego a las buenas prácticas globales de gobernanza en áreas como la regulación, los permisos, la recaudación y las compras gubernamentales”.
Instaron a los jefes de Estado de México, Canadá y de Estados Unidos a comprometerse a realizar “acciones concretas” en la Cumbre, que será la primera en celebrarse en cinco años.
Afirmaron que al menos 20 millones de empleos en Norteamérica se ligan al comercio y la inversión que hay entre los tres países.
Aseguraron que por el T-MEC se tiene una plataforma unificada de cadena de suministro “pero aún queda mucho trabajo por hacer para asegurar que nuestra economía continental sea lo más resiliente e incluyente posible”.