Siete fueron los indígenas asesinados a balazos hallados dentro de los límites del municipio de Copanatoyac, en el Estado de Guerrero.
En Guerrero, durante la tarde/noche del pasado miércoles, siete indígenas víctimas de asesinato a balazos, fueron hallados en el lugar conocido como “Cerro San Marcos”, dentro de los límites del municipio de Copanatoyac.
Acorde a los reportes de las autoridades en Guerrero, las víctimas en cuestión habrían sido cruelmente asesinadas por civiles vestidos de policías comunitarios luego de que los indígenas en grupo a los cerros a buscar unos caballos que se encontraban perdidos el pasado 29 de junio, regresando solo 12 de ellos que lograron salvaguardarse posterior a ser fuertemente atacados a balazos.
Lo anterior fue informado por el presidente municipal, Jorge Aguilar, quien señaló que fue alertado del hecho el día 30 de junio.
Siete indígenas víctimas de asesinato en Guerrero
No obstante, fue hasta el 1 de julio cuando la Secretaría de Seguridad Pública informó que luego de múltiples recorridos de personal de la Unidad Aeromóvil en conjunto con la Fiscalía General del Estado (FGE) y del propio presidente municipal, no se logró obtener resultados positivos.
Derivado de estos hechos, fueron los mismos pobladores quienes iniciaron la búsqueda de las personas desaparecidas, las cuales fueron posteriormente localizadas en el “Cerro San Marcos”, ubicado en los límites de Zapotitlán Tablas. Trascendió que la mayoría de las víctimas fueron identificadas y sus edades oscilaban de los 15 a los 42 años, sin embargo, una de ellas que respondía al nombre de Avelino Villegas Morales, no fue localizado.
Cabe señalar que el reporte de la incidencia delictiva durante abril en el país, ubica a Guerrero en la posición número 10 a nivel nacional en cuanto al homicidio doloso por cada 100 mil habitantes, de acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Los habitantes del estado de Guerrero han tenido que acostumbrarse a los homicidios, balaceras y desapariciones que, lamentablemente ya son parte de su vida y rutina diaria.