Pese a que en 2019 el proyecto de construcción del complejo de lujo “San Juan” en la Reserva de la Biósfera de Sian Ka´an fue rechazado por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), ahora dio su aval.
Se trata de un hotel y seis viviendas de lujo en un predio de 34 hectáreas en la zona costera de esta reserva.
El desarrollo se ubicaría aproximadamente en el kilómetro 43 del camino de terracería que conecta la zona urbana de Tulum por la comunidad Javier Rojo Gómez, conocida como Punta Allen.
De acuerdo con la justificación del proyecto se lee:
El potencial paisajístico del predio es de una gran relevancia tanto ambiental como para el desarrollo económico de la región a través del turismo sustentable ya que la Reserva de la Biosfera Sian Ka´an cuenta con elementos naturales con alto valor escénico y natural”
El terreno fue constituido de siente lotes y tiene una superficie de más de 340 mil metros cuadrados.
En seis de los lotes, de 100 metros de frente de playa cada uno, se construirán las viviendas.
En el séptimo lote, que es el de mayor superficie, se construirá el hotel, con un frente de 600 metros de playa.
El proyecto contempla una inversión de 500 millones de pesos.
RECHAZADO EN 2019
Este proyecto ya había sido rechazado. El 13 de marzo de 2019, la Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental (DGIRA) resolvió, a través del oficio SGPA/DGIRA/DG/W0009/19, negar la autorización en materia de Impacto Ambiental por no cumplir con los criterios de conservación ambiental.
De acuerdo con la resolución, no pudo demostrar congruencia con los preceptos establecidos en los Programas de Manejo de las áreas naturales protegidas Uaymil y Reserva de la Biósfera de Sian Ka’an, con respecto a los usos y capacidad de aprovechamiento de los predios.
Lo anterior fue una de las causantes para que le fuera negada la autorización.
En aquel entonces, en su resolutivo, la Semarnat expuso que el proyecto original presentó insuficiencia en elementos técnicos.
Estos para demostrar que las obras y actividades proyectadas no afectarían los componentes medioambientales que integran y definen la delimitación del área natural protegida.
El promovente ingresó una nueva solicitud en materia de Impacto Ambiental y, en esta ocasión, la Semarnat resolvió a favor del proyecto.