México ha llegado a un acuerdo con Estados Unidos para comenzar a deportar a personas migrantes desde ciudades fronterizas hacia sus países de origen.
Tras una reunión con funcionarios estadounidenses el viernes, el gobierno mexicano ha dicho que comenzará a deportar a personas migrantes para aliviar la presión que ha causado la migración masiva en sus ciudades del norte.
El Instituto Nacional de Migración de México no especificó cuándo comenzarían las deportaciones, pero el país ya está negociando con los gobiernos de Venezuela, Brasil, Nicaragua, Colombia y Cuba sobre los términos para devolver a sus ciudadanos a su lugar de origen.
Este acuerdo se produjo tras los aumentos migratorios en Eagle Pass y El Paso, donde se está sobrepasando la capacidad de los refugios locales, así como la del Centro de Recursos para Migrantes de San Antonio, por donde la mayoría pasa en su camino hacia su destino final.