Muertos por derrumbe en Miami suben a 11 y 150 personas siguen desaparecidas

Muertos por derrumbe en Miami suben a 11 y 150 personas siguen desaparecidas

El saldo de muertos por el derrumbe de un edificio cerca de Miami subió el lunes a 11, entre ellos dos venezolanos, mientras proseguía la búsqueda de 150 personas aún desaparecidas y los familiares desesperados temían lo peor cinco días después de la tragedia.

En pos de explicaciones, expertos analizaban posibles fallas preexistentes en el inmueble de 12 pisos del complejo Champlain Towers, que se desplomó en la madrugada del jueves en Surfside, a unos 20 kilómetros del centro de Miami.

Socorristas de Florida, apoyados por equipos de Israel y México, revisaban los restos de los 55 apartamentos reducidos a escombros

Desafiando las altas temperaturas y humedad, socorristas de Florida, apoyados por equipos de Israel y México, revisaban los restos de los 55 apartamentos reducidos a escombros.

“En las últimas horas, nuestros socorristas recuperaron a otra víctima. En total, el número de personas contabilizadas es ahora de 136. Con 150 desaparecidos. El número de muertes confirmadas es 11. Trágicamente, 11”, dijo en rueda de prensa la alcaldesa del condado de Miami-Dade, Daniella Levine Cava.

El jefe de bomberos de Miami-Dade, Andy Alvarez, declaró a la cadena ABC que se habían encontrado “huecos dentro del edificio” donde se podían hallar sobrevivientes. “Nos aferramos a esa esperanza de poder rescatar a alguien vivo”, dijo.

Dos ciudadanos de Venezuela están entre los 10 muertos confirmados. Se trata de León Oliwkowicz, de 79 años, y su esposa, Cristina, de 74, ambos residentes en Estados Unidos.

Sus cuerpos fueron encontrados el sábado y el domingo, respectivamente, dijo la policía de Miami-Dade.

La pareja vivía en la unidad 704 del inmueble, informaron sus hijas Daniela y Gabriela en un tuit.

29 latinoamericanos

Hay 29 latinoamericanos de los que todavía no se tienen noticias: nueve de Argentina, seis de Colombia, seis de Paraguay, cuatro de Venezuela, tres de Uruguay y uno de Chile.

Cristina Oliwkowicz tenía también nacionalidad uruguaya, pero la cancillería de Uruguay dijo que no estaba entre las tres personas de ese país que se siguen buscando.

Al menos cuatro canadienses podrían estar “afectados”, según funcionarios consulares.

Entre los latinoamericanos desaparecidos, estaba Sophia López Moreira, cuñada del presidente de Paraguay, su esposo, Luis Pettengill, y tres menores de edad, así como Lady Luna Villalba, quien había viajado con ellos como niñera, de acuerdo con información del gobierno paraguayo.

También era buscado el abogado chileno Claudio Bonnefoy, pariente de la expresidenta de Chile Michelle Bachelet. Su hija, Pascale Bonnefoy, que viajó a Miami para seguir de cerca las labores de rescate, destacó el trabajo “sin descanso” de los socorristas, pero pidió avanzar en las indagaciones.

“Solidaridad hemos recibido mucha, y ha sido muy bonito, pero creo que lo que hay que hacer es investigar las causas”, declaró a CNN.

El presidente estadounidense, Joe Biden, que ya declaró el estado de emergencia que habilita ayuda federal, dijo que su gobierno está listo para “cualquier apoyo o asistencia que se necesite”.

Llamadas desde un teléfono fijo

Ubicada frente al mar, la torre sur del complejo Champlain Towers se derrumbó sobre la 01H00 (05H30 GMT) del 24 de junio. Un video de vigilancia registró el desplome en segundos.

Una de las rescatistas, Maggie Castro, del Departamento de Bomberos de Miami-Dade, dijo que las “personas probablemente estaban en la cama cuando sucedió”, por lo que es poco probable encontrar a muchas a la vez.

“Parece lento, pero estamos avanzando lo más rápido posible”, aseguró a la AFP.

El nieto de una pareja de desaparecidos, Arnie y Myriam Notkin, dijo que su familia recibió 16 llamadas desde el teléfono fijo de sus abuelos, aunque solo escucharon ruido de estática.

“Estamos tratando de comprender lo que está pasando”, dijo Jake Samuelson al noticiero Local 10, sin saber si las llamadas eran de sus abuelos o si se debían a un falla mecánica. Las últimas fueron el viernes.

Dos enormes grúas y perros rastreadores ayudaban en los esfuerzos de búsqueda y rescate. Los socorristas cavaron una enorme trinchera a través de la montaña de hormigón y hierro retorcidos y todo escombro con “valor forense” estaba siendo llevado a un gran depósito para ser inspeccionado.

“Habrá una investigación minuciosa y completa sobre los motivos que llevaron a esta tragedia”, prometió Levine Cava.

Un informe sobre el edificio había señalado ya en 2018 “daños estructurales importantes”, así como “grietas” en el sótano, según documentos publicados el viernes.

“La impermeabilización debajo de los bordes de la piscina y la vía de acceso para vehículos (…) ya superó su vida útil y por lo tanto debe ser retirada y reemplazada por completo”, escribió en este documento el experto Frank Morabito, pidiendo reparaciones “dentro de un tiempo razonable”, sin señalar un riesgo de colapso.

Las reparaciones en el edificio, construido en 1981, estaban programadas y se habían comenzado obras en el techo.

El alcalde de Surfside, Charles Burkett, dijo que se estaba buscando alojamiento para todo el que deseara evacuar el edificio “hermano” casi idéntico de la torre a una cuadra de distancia, aunque aún no se han identificado problemas estructurales allí.